La enseñanza para niños comienza a partir de los 3 años y ofrecemos metodología Tradicional y Método Suzuki.
Metodología tradicional: Las clases de piano están enfocadas a niños o adultos y son clases individuales. Durante el tiempo que estamos en clases el profesor y el alumno están solos. A veces, cuando asisten niños pequeños, los últimos minutos invitamos al padre para ver el trabajo que hacen y como deben de trabajar y repasar los niños en casa.
En Bambera todas las clases de Piano, y de otros instrumentos, son individuales
Método Suzuki: Son clases de piano orientadas para niños a partir de 3 años. En función del proceso madurativo, a veces los niños comienzan más mayores. Por eso, muchas veces tenemos una charla primero, para conocer al niño y ver si está preparado para comenzar.
A estas clases asisten un niño con un adulto y el profesor. El padre/madre asiste siempre a todas las clases. Ambos acaban tocando el piano. Partiendo de la idea de que los niños les gustan las cosas que conocen y a las que se acostumbra, el padre debe de trabajar con el alumnos en casa de forma repetitiva mediante juegos y ser un reflejo para el niño.
El adulto aprende para poder enseñar y ser el entrenador en casa. Se basa en el juego, repetición y la escucha. Al principio los niños no aprenden a leer partituras.
Al tocar el piano también se desarrollan muchas habilidades de coordinación, independencia de manos, motricidad, velocidad y tono muscular.
Las clases individuales se complementan con 2 sesiones de clases colectivas al mes. Las colectivas comienzan cuando el alumno está preparado y puede seguir el ritmo a algún compañero. Compartir, escuchar… son valores muy valiosos en música. Por ejemplo, cuando asisten a las colectivas se motivan mucho unos a otros y aumentan las ganas de trabajar a diario para mejorar.
En nuestra escuela todos los niños valen para tocar el piano. Y es más, cada uno lo hará a su ritmo, aprenderá más o menos rápido, tocará mejor o no tan bien como sus compañeros. En ningún caso debemos de comparar la evolución de cada uno pues, la música no es una competición. +
A veces niños que evolucionan lentos al principio, despegan pasado un tiempo. No somos un conservatorio con una programación por cumplir. Nos adaptamos al ritmo de aprendizaje de cada niño.
La música es muy beneficiosa a nivel cognitivo en niños. Aumenta la memoria, estimula sentimientos y emociones, sociabiliza, favorece la imaginación, creatividad y sensibilidad. Por tanto cuando inicies a tu hijo en clases de piano piensa que lo más importante es esto y si llega a ser un gran pianista, pues mejor todavía.